El mármol es uno de los materiales con más de tendencia especialmente el mármol blanco. La verdad es que el mármol es precioso, neutro y versátil, pero también tiene algunas desventajas a tener en cuenta, como que es sensible química y mecánicamente, o dicho de otro modo, es susceptible a las manchas, a los arañazos…
Al mármol hay que cuidarlo, es un producto natural que desarrolla una pátina (Capa fina de óxido de color verdoso que se forma en el bronce y en otros metales a causa de la humedad) con el uso, envejece. Dicho ésto surge la pregunta de si es un material adecuado para la cocina. Todo depende del uso que se le vaya a dar y de la importancia que tenga para cada uno la estética en la cocina, la disposición a cuidarlo y mantenerlo en buen estado, pero lo cierto es que se utiliza mucho, y ahora más que nunca porque está muy de moda. Nosotros no la recomendaríamos en una cocina industrial de mucho uso donde haya continuas salpicaduras que no puedan limpiarse rápidamente, pero ¿por qué no en otras cocinas que casi no se utilizan, o sus usuarios se limitan a preparar en ellas bocadillos y cosas por el estilo?.
Vamos a ver cuáles son sus principales ventajas y desventajas.
Principales ventajas del mármol son:
- Cada veteado es diferente y cada pieza es única.
- Belleza insuperable.
- Es resistente al calor.
- Resiste bastante bien los golpes y no se abolla.
- Se adapta bien con muchos estilos decorativos.
- Está disponible en el mercado en una gran gama de colores y veteados, lo que ofrece una gran variedad de opciones decorativas.
Principales desventajas del Marmol son:
- Es un material poroso, propenso a manchas.
- Tiene baja resistencia a la abrasión, puede rallarse con relativa facilidad.
- Requiere un mantenimiento continuo, requiere cuidados.
- No puede limpiarse con productos ácidos o abrasivos como la lejía, que pueden dejar manchas.